Si eres como yo, que disfrutas el dulce a cualquier hora, definitivamente querrás seguir leyendo el post de hoy. Aprenderemos a hacer una galleta especialmente diseñada para el desayuno, pero que funciona en todo momento del día. Hablo de las galletas de granola.
Difícilmente puede haber algo más rico, combina lo mejor de dos mundos: lo suave de una galleta fresca con lo crocante una granola deliciosa. Me atrevería a decir que en este punto ya los convencí, ¿o no?
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Si les faltan más argumentos, qué tal si les cuento que estas galletas de granola son un energético snack para toda la familia. Funciona ideal en las loncheras de los ‘peques’, pero también para ti antes de salir a correr o hacer ejercicio.
Por el exceso de azúcar ni te preocupes, estas galletas solo llevan azúcar de coco, aunque también se pueden hacer con azúcar morena. Les recuerdo rapidito por qué, de acuerdo con Healthline, es una buena alternativa:
- Aporta minerales como hierro, zinc, calcio y potasio
- Aporta polifenoles y antioxidantes
- Tiene un tipo de fibra llamado inulina, que ralentiza la absorción de glucosa y puede explicar por qué el azúcar de coco no sube el índice glicémico como sí lo hace el azúcar de mesa.
Pero bueno, dejemos la carreta y aprendamos a hacer estas deliciosas galletas de granola.
Galletas de granola
Ingredientes
- 2 y 1/2 tazas de azúcar morena o de coco
- 1 taza de ghee
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- 2 huevos a temperatura ambiente
- 1 y 1/2 tazas de harina integral
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1 taza de avena en hojuelas
- 2 tazas de granola
Preparación
- Bate el ghee derretido con el azúcar, integra bien y añade huevos y esencia de vainilla.
- Aparte, en otro bowl, integra harina integral, avena, granola, sal y bicarbonato.
- Con ayuda de una espátula, revuelve mezclas seca y húmeda hasta lograr una masa compacta. Forma bolitas más pequeñas que de ping pong y enfría por 30 minutos en la nevera.
- Mientras tanto prepara una placa con papel mantequilla y precalienta el horno a 180°C. Pon allí las bolitas lo suficientemente separadas y lleva al horno de 12 a 15 minutos. Repite con el resto de la masa. Deja enfriar las galletas totalmente y disfruta.
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