Bueno, andamos como muy pegados de las sopas en este blog. Solo la semana pasada estaba compartiéndoles una versión aligerada de la cazuela de mariscos. Hoy traigo otra opción, ideal para la cena o para servir como entrada antes de un almuerzo, es una crema de vegetales asados. Créeme no es tu típica sopita de verduras.
Tomo bastantes cremas de vegetales y más ahora que estoy tan próxima a casarme, esa la forma más práctica de consumir verduras de noche. Sin contar que es una alternativa reducida en carbohidratos que me deja muy satisfecha.
Todas las semanas preparo una crema de vegetales distinta, dependiendo de lo que tenga a la mano en la nevera. Son ricas, claro, pero llega un punto en que aburren. ¿Cómo ponerle otro sabor?
Es impresionante lo que cambia una crema de vegetales solo con un sencillo twist: asar las verduras en el horno. Yo generalmente los cocino en abundante caldo hasta que estén lo suficientemente suaves para licuar. Y claro, quedan bien también, pero el asado da un ligero sabor ahumado, que para mí es una debilidad.
La inspiración llegó directamente desde el feed de una colega bloguera también colombiana, se llama Maca Bites, a.k.a. María Camila Mosos, y les recomiendo seguirla. Vi este video en su cuenta de Instagram y supe que tenía que copiarme, aunque yo ensayé con otros vegetales. Les dejo el video que ‘Maca’ hizo e inmediatamente después mi receta. ¡Buen provecho!
Crema de vegetales asados
Ingredientes (para 4 porciones)
- 3 zanahorias grandes, peladas y picadas
- 2 pimentones rojos (o uno rojo y uno amarillo)
- 2 cebollas blancas pequeñas
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- 2 tazas de caldo de pollo o de verduras
Preparación
- Precalienta el horno a 180°C.
- Masajea los vegetales con aceite de oliva y espolvorea con sal y pimienta. Lleva a una bandeja y hornea por 40 minutos.
- Retira la piel, tallo y semillas de los pimentones y transfiere la pulpa a la licuadora junto a los otros vegetales horneados y el caldo. Procesa por un par de minutos, hasta que obtengas una consistencia espesa y homogénea. Puedes añadir más o menos caldo dependiendo de la textura que desees. Verifica sazón y sirve enseguida. Decora con aceite de oliva, hojas de albahaca frescas y semillas de ajonjolí.
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