Ahhhh…. la arepa. Creo que cualquier persona que me lea en Colombia o en Venezuela se saborea con ver esta sola palabrita, ¡traduce magia! Simboliza uno de los manjares típicos y transversales de las gastronomías de ambos países. Pero también equivale a muchas calorías y grasa de más, y ahí es donde se nos daña el idilio. ¿Y si les dijera que pueden hacerlas más saludables? Sigan leyendo para conocer recetas de arepas sanas.
Al comenzar una dieta creemos que debemos despedirnos de las arepas, ¡nada más alejado de la realidad! Lo cierto es que no todas son hechas iguales. Y, lamento decirles, que sí hay algunos tipos que debemos dejar para las comidas premio que eventualmente disfrutamos. Pero cuando el antojo ataca, prefiere arepas sanas al estilo Gastroglam. ¡Nada más sabroso!
En los años que llevo cocinando saludable, las he preparado de todas las formas imaginables para no aburrirme. Y hoy quiero compartir mi aprendizaje con ustedes. Por eso, en el post de hoy les daré tres consejos para que sus arepas sanas sean ademas deliciosas. ¡Podrán disfrutarlas sin pecar!
1. Cómelas rellenas
La masa de las arepas sanas no tiene mayor ciencia: masa de maíz, agua y sal. Punto. Eso nos deja con una arepa bastante simple, lo sé. Una de las claves para que estas arepas se mantengan sanas es rellenarlas. Con esto sí tenemos algo más de libertad. Yo, por ejemplo, las disfruto con huevos pericos. Para los que no los conocen, estos son básicamente huevos revueltos con tomate picado y cebolla -larga, preferiblemente- picada. Es un clásico del menú de desayunos en Colombia, mi país.
Pero hay muchas formas más, los venezolanos, por ejemplo, desmenuzan pechuga de pollo y la mezclan con puré de aguacate, se conoce como la reina pepiada y queda increíble. ¿Qué otros ingredientes podemos preferir? Jamón bajo en grasa, vegetales salteados, carne molida y hasta atún. ¡Dale un giro a tus arepas sanas con un relleno!
2. ‘Pimpea’ la masa
No es una regla que las arepas sanas deban llevar harina de maíz, agua y sal únicamente. Lo que queremos es descartar algunos venenitos que pueden hacerlas menos saludables. Pero para mejorar el sabor de la masa, puedes preferir un queso rallado bajo en grasa. Añadiéndolo logramos una textura más suave y un mejor sabor. Recuerden, la sustitución de ingredientes es la clave para seguir disfrutando de buena comida, pero más saludable.
Las semillas, frutos secos y cereales integrales, entre otros, son una buena adición a la masa, además de aportarle otro sabor. Recomiendo la avena en hojuelas, semillas de chía o linaza, quinoa cocida y hasta almendras fileteadas. No olvidemos que muchos de estos ingredientes tienen la ventaja de aportarnos fibra y nutrientes.
3. No siempre deben ser de maíz
¿¿Qué?? Esto a muchos les parecerá una ofensa, pero les digo: ¡dejemos los tradicionalismos! Se sorprenderían de saber qué ricas quedan las arepas hechas con otros ingredientes, los tubérculos y los cereales son mis favoritos. Una de mis arepas sanas favoritas, por cierto, son las de yuca. Pero también las he hecho con plátano, papa y camote, ambas quedan magníficas.
Si las quieres hacer con cereales, simplemente los mueles o remojas, dependiendo del caso, para lograr una masa. Yo he hecho unas muy ricas a base de arroz cocido y molido. Pero tampoco descarto las de avena y hasta con la quinoa cocinada quedan excelentes. Tienen sabores que te sorprenderán.
¿Se te ocurre cómo más darle un giro a las arepas sanas? Envíame un mensaje con tus sugerencias a mis cuentas en Facebook, Instagram y Twitter.
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